ASCENSIÓN BIIGUINOUSSENE. EL ATLAS (4ª parte)

Cuarto y último día por la cordillera del Gran Atlas. Como el resto de días que llevamos por aquí, amanece un día precioso en el intentaremos subir el pico BIIGUINOUSSENE (4.002 m), pasando primero por el dedo del Tadat.
Después de bajar unos metros desde el refugio nos metemos de lleno en la canal que nos dejará en la base del dedo. La canal salva un desnivel de unos 600 mts. y tiene una inclinación máxima de unos 40º.
En la foto, Hector y Alberto al comienzo de la misma.




El comienzo de la canal vista desde abajo. Fisicamente nos encontramos bastante bien y ya estamos aclimatados completamente a la altitud, así que la afrontamos con fuerzas sabiendo que será la última ascensión que hagamos.




A medio camino aparece el dedo del Tadat con sus 3.837 mts.




Vista de los Afella desde la canal. El sol comienza a pegar de lo lindo.




Estamos a puntito de llegar al dedo y la canal se ramifica. El buen estado de la nieve ayuda a subir con mucha confianza.




Alguno se nos ha adelantado y por las huellas dejadas, parece que han disfrutado lo suyo. Al ver las huellas nos acordamos de los dos esquiadores del grupo, Josegui y Dani, que saldrán hoy pero sin intención de hacer nigún pico.




Vistas del TOUBKAL y TOUBKAL OESTE. Se aprecia perfectamente las pendientes que tuvimos que salvar ayer durante la subida.




Aquí estoy yo en la base del dedo una hora y cuarenta y cinco minutos después de meternos en la canal.




En el dedo hacemos una paradita para reponer fuerzas y sacarnos algunas fotos, pero enseguida cogemos la arista que nos dejará en la cumbre del BIIGUINOUSSENE.




Ya estamos en la cima del BIIGUINOUSSENE con sus 4.002 mts. Alberto, Hector y yo en la cima, con el Toubkal detrás. Sexto y último pico de más de 4.000 mts. que haremos durante estos días en el Gran Atlas.




De izquierda a derecha, el RAS, el TIMESGUIDA, el AKIOUD, y una de las cumbre de los AFELLA desde el pico BIIGUINOUSSENE.




Viendo que la nieve está en muy buenas condiciones, decidimos no bajar de nuevo hasta el collado y tirar "por la calle de enmedio". Unos metros más abajo, en cuando pierda algo de inclinación, practicaremos de nuevo el "culimg" y lo que tardamos en subir unas tres horas, lo bajaremos en 20 minutos.




De vuelta al refugio, nos queda lo más doloro: hacer la mochila y tirar para abajo ya que a las cinco hemos quedado con el taxista que nos llevará de vuelta a Marrakech.




Fotos del refugio camping gite Mouflon. Como se puede ver en las fotos el refugio está muy bien, además el trato con todo el personal que por allí había fue excelente. En todo momento estaban pendientes para que no te faltara nada. Dormir cuatro noches nos costo unos 360 Dirhams (36 €), la mitad de lo que vale algún refugio una sóla noche en Alpes.













El "jefe" observa como hacemos los últimos preparativos. Le llamabamos el "jefe" porque parecía que era el que mandaba en el refugio. Estuve más de media hora con él para hacer las cuentas. Su vieja calculadora pareció que iba a ponerse a echar humo en cualquier momento. Entre todos nosotros les dejamos unos 120 Dirhams de propinilla (12 €) y se pusieron más contentos que unas castañuelas.




Atras queda el refugio y cuatro días perfectos para hacer montaña.




Dani y Josegui deseando llegar a las mulas y quitarse el peso extra que llevaban encima. (y el no extra también).




De nuevo en el santuario de Sidi Chamharouch (unos 2.310 mts.), en el que nos estaban esperando unos cuantos bereberes a los que dijimos que les comprariamos algo a la bajada.




A punto de llegar a Aremd.




La kasbah del Toubkal vista desde arriba. Llevamos unas siete horas de pateo, las últimas con todo el peso de la mochila, y las piernas empiezan a pesar.




Llegada al pueblo de Imlil donde muchos lugareños nos esperaban ante la promesa de comprarles o cambiarles algo. Te pedian desde moviles, hasta botas, pasando por camisetas o "la pioleta".
Aunque tampoco lo creimos del todo, ahí estaba el taxista que nos dijo que nos llevaría de vuelta a Marrakech.



La experiencia en el Gran Atlas ha sido alucinante, pasando cuatro días en el que hemos disfrutado de la montaña como locos. Una zona apenas masificada (al menos los días que nosotros estuvimos) y con muchisimas posibilidades. Además la ubicación estratégica del refugio permitía no machacarse mucho fisicamente. Muchísima nieve para lo que yo creía de Marruecos y unos picos que nada tienen que envidiar a otros mucho más conocidos.

Nos vamos con 6 cuatromiles en la buchaca y de buena gana nos hubieramos quedado algún día más, pero......... otro año volveremos.